lunes, 25 de noviembre de 2024

Vacunología aplicada Chistavina

Durante la pandemia de los últimos años, he podido observar hasta qué punto la enfermería en los centros de salud padecen un retraso considerable en la vacunación de las personas. Sobre todo en la forma de coger la jeringuilla como en la técnica obsoleta previa a vacunar.

Pensarán lo que quieran del momento que le van a vacunar, pero por mucho que hayan estudiado la carrera de Enfermería, considero bochornoso que en los centros académicos no se dé Vacunología Chistavina Aplicada. 

De otro modo nunca alcanzarán la maestría chistavina para vacunar lo que se ponga por delante sin miedo, incrustando bien profundas las agujas de las jeringuillas con maestría, sabiendo agarrar las narices de los que se vacunan para que no se muevan.

Para mí la mejor técnica de vacunar se practica en el Valle de Chistau. Ya les gustaría a muchos saber hacerlo con un simple gesto como lo hacía Miguelón, que me enseñó y me graduó enseguida. 

"Bernabé, agarra a la vaca por las fosas nasales. Coge bien la jeringa con los dedos incrustados bajo el disparador. Introduce la aguja en el cuello de la vaca y...suéltale todo el antibiótico de forma pausada y tranquila."

La vaca intentó mover el cuello pero yo la tenía bien cogida de sus fosas nasales. No dijo ni mu. Le puse la inyección y se fue al rincón del patio junto a su ternera. "¡Hostias, Bernabé!. La vaca ni se ha quejado. Tas Graduado." Y siguió cargando de antibióticos otras jeringas para las siguientes vacas.

Os cuento que cuando en Málaga fui a ponerme la vacuna de la Covid a lo largo de estos años, no me puse solo una vacuna, me puse tres: Covid, gripe y neumococo. 

Le dije a la enfermera que me las cediera que yo mismo me vacunaría más rápido poniéndome las tres de golpe. Y le pregunté si tenía jeringuillas y agujas más grandes porque me parecían muy pequeñas. Le dije que esas jeringuillas para vacunar no le harían ni pupa a la gente del valle porque las agujas estas les pareceran diminutas. 

En eso pasó una señora vacunada que me miró y se fue llorando. 

- ¿Lo ves?. Las agujas pequeñas hacen daño. Si quieres vacunar a la gente de verdad usa tal medida con tal jeringa y llorarán de verdad.

- ¿Cómo es eso?. Yo soy licenciada en enfermería.

- ¿Dónde se licenció?.

- Estuve varios años en Madrid estudiando.

- ¡Venga, venga!. ¿Varios años?. Cuanto más tiempo tarda en licenciarse más tonto es el alumno. Yo me licencié en diez minutos. Hay que saber coger la vaca por las fosas nasales. Apretar fuerte para que no se mueva un ápice y ponerle la vacuna en el cuello. La vaca nunca rechistará. Y sin embargo usted tiene gente quejándose por una agujita tan pequeña como diminuta. ¡En Chistau la gente se vacuna con aguja bien grande y sin rechistar!. Nada más se colocan la vacuna ya están tirando para la montaña a currar.

- ¿Pero tú de dónde has salido, Bernabé?. ¿Sabes bien lo que estás diciendo?. No hables muy alto que asustas a los que vienen a vacunarse.

- ¡Vale!. Pero tú hazme caso y vete a Chistau para que te licencien. 

- ¿Y eso dónde es?. 

- En el pirineo casi francés 😂

Así están las cosas por Andalucía donde la gente no se identifica con Sevilla. En la Alta Andalucía somos raza mediterránea, como en Aragón, que fue el reino más rico de la península que se extendía por el Mediterráneo. Por eso en el sur de Italia no se identifican con los italianos del norte sino con los españoles de la costa. 

En Napoles y Sicilia se vacunan como mandan los cánones. Con jeringas de vacas y agujas de medio pelo. Los cagaos huyen y por eso hay más turismo en el norte de Italia que en el sur.

Además, la vacunología chistavina tiene connotaciones sexuales. Dicho por expertos de Harvard, que la consideran muy eficaz contra las ladillas y los divorcios, contra las señoras vengativas y contra los señores calzonazos haciéndose el escandinavo. 



Vacunología aplicada Chistavina

Durante la pandemia de los últimos años, he podido observar hasta qué punto la enfermería en los centros de salud padecen un retraso conside...